RESPETO
Por: Licda. Mirna Lissett Carranza Archila
Docente de Zootecnia
Tuve la oportunidad de observar a un grupo de estudiantes universitarios, mientras se llevaba a cabo un acto protocolario dentro de la universidad, organizado por la Comisión de la Olimpiada de las Ciencias 2010; actividad que año con año se realiza para estudiantes del Nivel Medio por parte de la Universidad de San Carlos de Guatemala y otras instituciones.
Es irónico, que los estudiantes de esta casa de estudios, que suponemos con un nivel más superior en cuando a su educación o escolaridad no muestren respeto mientras se entona el Himno Nacional, simplemente por tratarse de un acto que se emana ajeno a las actividades normales de la Universidad. Al menos, si estamos dentro de la misma área donde se lleva a cabo el acto, debería mostrarse un comportamiento de respeto hacia lo que se desarrolla y por el significado mismo que representa el Himno Nacional.
¿Será que al ingresar a las aulas universitarias, se olvidan esos valores que a diario nos inculcan en la escuela? Quizá nos volvemos indiferentes, porque la libertad la mal entendemos como un derecho de hacer lo que nos venga en gana.
Yo diría, que nos equivocamos cuando pensamos que respetar nuestros símbolos patrios, como la Bandera y el Himno nacional, es cosa de niños. Por el contrario, el RESPETO es un valor que debemos cultivar a lo largo de nuestra vida; entre más alto vamos escalando en el saber, en la educación, en lo laboral y en edad, más afianzado y grande debe ser el respeto hacia los demás y hacia la patria.
Mi estimada licenciada, uste tiene toda la razón al indicar que los valores cívicos se han perdido, es todo un sistema desvalorizado que ha debilitado la identidad del ciudadano, en donde el civismo es considerado como un valor fuera de época, perdiendose el amor por la patria, que lamentablemente no se cultiva ni en el hogar ni mucho menos en los centros de enseñanza. Pero lo doloroso, es que el universitario no reflexino sobre el tema, por lo que ya no constituye el ejemplo que espera la sociedad, esa luz de sabidurìa que encamine el pensamiento de nuestros pueblos, para saber como sacarlos de la pobreza, pero una pobreza de ideales.
La feliciito Mirna, varias veces he obsevado lo que usted escribe sin embargo no había analizado a profundidad el problema. Tiene razon, nosotros los profesores debemos dara el ejemplo de respeto y formentar en los estudiantes ese respeto. De ahora en adelante trataré de reflexionar con los estudiantes sobre este tema.